Aprender a quererse a uno mismo es fundamental para tener relaciones solidas y una autoestima alta. El amor propio es una acción que empezamos a cultivar desde que nacemos y vamos desarrollando en un entorno familiar funcional. Podría decirse que es el aprendizaje más importante que da pie a que se cumplan todos los demás que nos formarán como personas autosuficientes. En el blog de hoy te contamos algunas maneras para aumentarlo día a día. Así que, sigue leyendo o aprende de manera profesional con nuestra Maestría en Psicología Holística.

¿Qué es el amor propio?

El amor propio hace referencia al autocuidado que tenemos a nosotros mismos, es decir, cómo respetamos nuestra escala de valores, principios y la auto aceptación de nuestro ser.

Esta autoestima surge con el reconocimiento de nuestros cuidadores primarios y con el cariño que nos dieron desde las primeras etapas de vida. Por ello, es una base fundamental con la que podremos desarrollarnos como adultos seguros de nosotros mismos. Así que, hay que darle la importancia necesaria cada día al crecimiento emocional tanto como al físico o la salud orgánica.

Claves para desarrollar nuestra autoestima

Una de las maneras de aumentar nuestro amor propio es fortaleciendo nuestras aptitudes y conductas que nos ayudan a realizar las actividades necesarias para poder vivir. Esta estima propia se vuelve más intensa cuando valoramos nuestras fortalezas, cualidades, así como los aspectos negativos y áreas de mejora. Aprender a reconocer nuestros errores y desarrollar una capacidad crítica nos llevará a un autocuidado más transformador.  A través de las siguientes claves podemos desarrollar la fuerza necesaria para auto respetarnos y proyectarnos sabiamente hacia los demás.

Cultivar la libertad individual

Hay que trabajar la dependencia emocional para aumentar nuestro amor propio. La dependencia emocional es un rasgo negativo que nos hace estar con otras personas por necesidad y no por elección propia. Aprender a estar con uno mismo y a ser individual es muy importante para después poder estar en sociedad sin ser tóxicos. Primero hay que sanar la relación con uno mismo para establecer relaciones duraderas y estables con los demás.

Buscar relaciones sanas

Mantener relaciones saludables ayuda a que nuestro valor propio aumente y, por tanto, la autoestima. Una familia que se desenvuelva de manera sana, un trabajo, unos amigos y una pareja que funcione son puntos básicos para aumentar el amor propio. Esto significa que sentirnos protegidos, comprendidos y respetados refuerza la seguridad en nosotros mismos.

Reconocer nuestro trabajo

Trabajar o sentirnos útiles aumenta de manera positiva la idea que tenemos de nosotros mismos. Por lo tanto, valorar nuestro trabajo diario nos ayudará a reconocer nuestro esfuerzo y nuestra auto realización personal. El trabajo que hacemos a diario es un puente para satisfacer nuestras necesidades básicas.

Cuidar nuestras necesidades básicas

Amarse a uno mismo es sinónimo de autocuidado en diferentes aspectos de nuestra vida. Todo empieza desde el autocuidado intelectual, con el que protegemos nuestra mente y sacamos nuestra parte más creativa para estimular nuestros pensamientos. También, se debe cuidar la parte corporal, ya que atendiendo a nuestro cuerpo aumentamos nuestra salud física y nos liberamos de estímulos estresantes. Además, no hay que olvidar nuestro cuidado emocional y espiritual, esa capacidad para conectarnos con nuestro interior para atender completamente el aquí y el ahora.